Sexualidad en la adultez

Cuidados, prevención y desarrollo de la expresión sexual

La adultez comprende de los 29 a los 59 años. los patrones de desarrollo adulto no se configuran como algo novedoso, sino más bien como la consolidación de los aprendizajes previos y un perfilamiento cada vez más claro de la individualidad. Durante este período se fortalecen la identidad, la personalidad y los gustos sexuales favoreciendo la materialización de los objetivos de vida planeados por cada persona.

Características de un adulto sexualmente saludable

Aplica sus conocimientos y sus habilidades para el disfrute y el placer tanto propios como de su(s) pareja(s).
Expresa de manera asertiva sus deseos, fantasías y necesidades sexuales.
Practica su sexualidad de manera congruente con sus valores.
Discrimina entre los comportamientos sexuales positivos y aquellos que son dañinos para sí mismo(a) y/o para otras personas.
Respeta sus propios límites y los límites de conducta hacia otras personas
Respeta sus propios límites y los límites de conducta hacia otras personas
Establece relaciones sexuales que se caracterizan por su honestad, equidad y responsabilidad.
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Situaciones de la vida cotidiana como la vida laboral, las presiones académicas, las alteraciones de la salud física y mental, la familia y los distintos hábitos, así como, los deseos, creencias, actitudes, valores y relaciones interpersonales, influyen directamente en la forma en la que expresamos y vivimos nuestra sexualidad; la sumatoria de estos factores define una buena salud sexual o, la existencia de alteraciones y/o comportamientos limitantes o dañinos que limitan una vida plena desde el placer.

Consejos que te pueden ayudar a vivir una sexualidad plena