Nicotina y tabaco

Sin importar si es la primera vez que lo intentas o ya lo intentaste antes, cuando escoges una fecha tomas el control y te das tiempo para prepararte.

Pregúntate cuáles son los beneficios que quieres obtener al dejar de fumar, nadie conoce mejor que tú lo que es importante para ti, mantén tus razones presentes y busca apoyo para recordarlas.

Algunas situaciones pueden hacerte sentir el deseo de fumar, como: después de una comida, al despertar, en celebraciones, durante un descanso; sentimientos de estrés, ansiedad, tristeza, soledad, entre otras. Conocer las situaciones que te producen ganas de fumar te permitirá cambiar tus rutinas y manejarlas.

Los antojos duran solo algunos minutos y puedes combatirlos rápidamente con actividades que te distraigan, haciendo actividad física, tomando agua, escuchando música, buscando un lugar libre de humo, ocupando tus manos y tu boca o pidiendo apoyo a tus familiares o amigos.

Dejar de fumar puede ser una tarea difícil, así que mereces celebrar tus logros. Proyecta recompensas para cuando completes un día, una semana, un mes y más tiempo sin fumar. La mayoría de las personas necesitan varios intentos antes de dejar de fumar definitivamente, así que no te castigues, considera que cada recaída es una oportunidad para aprender y hacerte más fuerte para el cambio.